 
                    Toxina botulínica (Botox)
La aplicación de Botox o toxina botulínica es una opción no quirúrgica para pacientes que buscan rejuvenecer la expresión de su rostro y prevenir la aparición de arrugas.
Permite atenuar o desaparecer las líneas de expresión facial, logrando un aspecto más juvenil, descansado y alegre.
Su uso es más frecuente en el tercio superior de la cara, pero es posible aplicarlo en otras zonas de esta.
Su aplicación permite tratar condiciones como:
  – Entrecejo arrugado.
  – Caída de la cola de la ceja.
  – Patas de gallo.
  – Líneas de expresión en la frente
  – Líneas alrededor de los ojos.
  – Apariencia de “piel de naranja” en mentón.
  – Líneas del cuello.
  – Levantamiento de esquinas de la boca.
  – Axilas (hiperhidrosis).
  – Entre otros.
Es un tratamiento seguro, no invasivo, realizado en consultorio, en un tiempo aproximado de 20 minutos. Es poco doloroso y no requiere de incapacidad. Su efecto es temporal, inicia a los 3 días y tiene una duración de 4 meses.
En la consulta se hace una evaluación detallada de las zonas a tratar y se establece un plan de tratamiento personalizado según las necesidades de cada persona.
RESULTADOS
 
                    


